Unas 20 familias resultaron anegadas en la jornada de ayer en Medinas y Ciudacita, al este de Concepción, a raíz del desborde del río Medinas. No se practicaron evacuaciones ni las aguas ocasionaron pérdidas de bienes, según informó la Policía. Las intensas precipitaciones registradas en la noche del miércoles y madrugada de ayer en la zona serrana de esta provincia y Catamarca, han producido el aumento importante de los caudales de los acueductos del sur tucumano.

El Medinas fue el que más problemas causó. Se desbordó en dos sectores: uno conocido como “camino a Los Gucheas” y el otro en Ciudacita. En el sur tucumano comenzó a llover con intensidad alrededor de las 18. Aunque la precipitación trajo alivio luego de una jornada sofocante, volvió a encender la preocupación de las familias que viven próximas a los cauces y puso en alerta a Defensa Civil y bomberos.

“Desde las nueve sabíamos que iba a llegar la creciente. Es que recibimos noticias de que en los cerros llovió bastante. Entonces nos comenzamos a preparar levantando los muebles del piso. Y pusimos bolsas con arena en las puertas. Por suerte el agua llegó, pero no entró a casa”, contó Ramón Ovejero (83 años) de Medinas. “No es la primera vez que una creciente me acorrala. En otros años la pasé peor. Una vez perdí casi todo”, recordó el hombre.

Pedro Barraza relató que la creciente lo sorprendió mientras horneaba pan casero para la familia. “El agua llegó por la calle y de a poco nos empezó a rodear. Todo el patio se convirtió en un lago, pero por milagro no entró a nuestra vivienda. Los chicos estaban asustados”, agregó el hombre. Recordó que hace cuatro años, un 4 de marzo, sufrió el anterior desborde del Medinas. “Entonces el río fue más dañino. El nivel del agua fue de un poco más de un metro. Perdí varias cosas”, dijo el hombre.

María, hermana de Pedro, advirtió que la población de Medinas está expuesta a sufrir una inundación grande en razón de que el piso del río está colmatado y cuando crece se desborda con facilidad. “Por suerte no llovió mucho este verano; de lo contrario la hubiéramos pasado feo”, observó.

Sólo susto

Carlos Soria, de los bomberos de Villa La Trinidad, dijo que su agrupación se desplegó en Medinas alrededor de las 8 ante la aproximación de la creciente. “En una hora y media el agua que salió del río cubrió calles, canales y acequias que no estaban limpias. La gente atinó antes que nada a proteger muebles y electrodomésticos que pusieron en lugares altos. Pero la masa líquida no avanzó hacia el interior de las viviendas”, explicó. El segundo jefe de la Regional Sur (URS), comisario mayor Julio Gutiérrez, dijo que las copiosas lluvias que se produjeron en las serranías del oeste tucumano en la noche del miércoles y la madrugada de ayer pusieron desde primeras horas en alerta a los efectivos de su dependencia, que mantuvieron un permanente seguimiento de la evolución de los ríos de la zona. “Aunque la subida rodeó las viviendas de las familias, no alcanzó a ingresar al interior. Se trató de evacuar a personas de avanzada edad, pero se resistieron. Estuvimos desplegados en toda la zona anegada”, informó el alto oficial.

Los habitantes cercanos a los ríos Gastona, Chico y Medinas se mantuvieron en vilo durante toda la noche de ayer. Desde Las Estancias (Catamarca) llegó el alerta sobre la crecida de los ríos y arroyos de esa jurisdicción. Tal como se previó, las correntadas bajaron hacia la llanura tucumana.

Se trató de la segunda tormenta en pocos días que arreció en esa localidad catamarqueña y en las serranías tucumanas. En la llanura de Tucumán la lluvia llegó finalmente tras una prolongada sequía que puso en riesgo varias producciones estacionales. Los productores, principalmente cañeros, respiraron más aliviados.